Con la llegada de la pandemia comenzó a oler a muerte, comenzamos a vivir y a morir en soledad. Llegó tan rápidamente, que tardamos en concienciarnos de lo que estábamos viviendo. Parecía todo tan surrealista cuando en verdad era la realidad que nos rodeaba. Hasta ahora España había sido mi casa y de repente me encontré atrapada en una jaula. El latido del corazón iba acelerando ya que no paraban de llegar correos donde me avisaban que habían cancelado todos los vuelos, no había manera de llegar a mi nido. Esta pandemia ha sido capaz de parar el mundo entero y esto nos ha dejado sin palabras. En cada uno de nosotros se ha generado un baile de emociones ya que estábamos obligados a estar en casa, sin tener ningún tipo de contacto personal, sin poder llevar por delante nuestras rutinas. En mi mente había un caos, lo único que quería era despertar de esta pesadilla. Empecé a darme cuenta que fuera de mi casa estaba el peligro pero también los valientes. De hecho me hice fuerte y quise ver mi vida de otro color. Ya no la pintaba de negro, aunque las noticias nos entristecían, sino que de rojo. Sí, elegí el rojo porque es el color de la revolución. El covid19 me ha cambiado, me siento diferente. Valoro cosas que antes no valoraba tanto, como el hecho de poder llenar de besos a mi abuela, de montarme en un avión para ver a mi familia, de dar un abrazo a mis amigos y ver las sonrisas de las personas. Hay que vivir la vida y aprovecharla cada instante. Eso es lo que nos ha enseñado esta pandemia... todas crisis tiene una solución, un final y una enseñanza para la vida. En "Voces desde el confinamiento" los alumnos y alumnas del Máster de Necesidades Específicas Educativas, realizaron un trabajo de introspección en el que se preguntaron: ¿cómo me siento? ¿qué es lo que siento?. En base a las respuestas a dichas preguntas, escribieron un pequeño texto en el que trataron de reflejar lo que sentían. El resultado plasmó, a través de imágenes, sonidos y la calidad de las voces; todo aquello que hervía en su interior durante el confinamiento domiciliario que fue instaurado por el Gobierno Español durante el estado de alarma de 2020.